Hoy te traigo una entrevista muy especial con Rocío Manzano tras viajar por Francia haciendo turismo fluvial. Ella es creadora de lafabricaparis.com, un espacio donde el estilo de vida francés y la creatividad se dan la mano.
Hace poco se embarcó —literalmente— en una nueva aventura: explorar Borgoña-Franche compté a bordo de un barco fluvial.
Navegó sin prisas, durmió sobre el agua y descubrió, desde una perspectiva única, los paisajes, pueblos y sabores de esta preciosa región francesa.
En esta charla cercana y auténtica, Rocío nos cuenta cómo vivió la experiencia desde dentro: sus dudas antes de zarpar, lo que más le sorprendió y todo lo que se lleva de esta escapada tan diferente.
Si alguna vez has soñado con viajar por Francia, desconectar del mundo, rodearte de naturaleza y dejarte llevar por el ritmo de los canales, su testimonio te encantará.
Sigue leyendo y déjate inspirar por esta forma diferente de viajar por Francia.
Cuéntanos un poco de ti: ¿quién eres y por qué te encanta viajar por Francia de diferentes maneras?
Soy Rocío, creadora de La Fábrica Paris, donde comparto rincones únicos de París y experiencias viajeras por toda Francia. Me encanta ir más allá de lo típico, descubrir lugares con encanto y vivirlos de una forma distinta: ya sea caminando por callejones escondidos, explorando mercados, probando rutas en tren o, como en esta ocasión, navegando por canales a bordo de un barco sin licencia. Creo que Francia tiene mil maneras de ser descubierta, y me gusta inspirar a otros para que la vivan a su manera.
¿Cómo nació tu blog y qué tipo de viajes sueles compartir con tu comunidad?
El blog nació como una extensión natural de mi trabajo en redes sociales: quería tener un espacio donde pudiera profundizar más en rutas, consejos y experiencias que en Instagram se quedaban cortas. Comparto sobre todo viajes dentro de Francia, escapadas originales y guías prácticas para que la gente pueda repetir la experiencia por su cuenta. Me gusta combinar lo útil con lo inspirador, para que mis lectores sientan que no solo están planeando un viaje, sino viviendo una historia.
¿Cómo surgió la idea de viajar por Francia en un barco fluvial?
Siempre me ha llamado la atención ver esos barcos navegando por los canales franceses, con familias y amigos disfrutando en cubierta. Me parecía una forma muy slow y diferente de viajar. Cuando Rocío, fundadora de Danfluvial, me propuso probarlo, me pareció la excusa perfecta para descubrir desde dentro ese mundo del turismo fluvial y compartirlo con mi comunidad.
Ver esta publicación en Instagram
¿Qué te contaba la gente sobre los viajes fluviales antes de hacerlo tú?
Algunos me decían que debía de ser difícil de manejar, que quizá me marearía o que sería aburrido si no hay muchas cosas que hacer. Otros me hablaban de lo relajante que era, de la libertad para parar donde quieras y del encanto de pasar por pueblos que no siempre se visitan de otra manera. Tenía opiniones muy diversas, así que fui con mucha curiosidad… y salí enamorada.
Antes de empezar y de reservar ¿Cuáles fueron tus mayores dudas?
La verdad es que yo no tenía otra cosa aparte de dudas. Tenía mil preguntas cómo: ¿seré capaz? ¿Será complicado? ¿Cómo se vive en un barco por unos días? ¿Qué región es la ideal para mí?
¿Cómo te ayudó Danfluvial a resolverlas, elegir barco y la ruta para viajar por Francia?
Desde el primer momento, Rocío y su equipo me explicaron con claridad cómo funciona la navegación sin licencia, qué modelos de barco se adaptaban mejor a nuestro plan y cómo sería el recorrido. Me ayudaron a elegir una ruta con la combinación perfecta de naturaleza, pueblos con encanto y puntos prácticos para amarrar y hacer compras. Además, me enviaron toda la información previa, mapas y consejos para que la experiencia fuera fluida y sin estrés, incluso para una “capitana” novata como yo.
Una vez llegaste al barco, ¿Recuerdas tus primeras sensaciones? ¿Qué sentiste al ver un barco tan equipado?
Lo primero fue sorpresa, estaba asombrada. Nuestro barco era el HORIZON 3, un barco de alta gama y me imaginaba algo más sencillo, pero el barco estaba completamente equipado: cocina, baño, camas cómodas, espacio para comer dentro y fuera… Era como tener una pequeña casa flotante. Me dio una mezcla de ilusión y tranquilidad saber que íbamos a estar cómodas durante todo el viaje.
¿Por qué elegiste Borgoña / Franche Compté como destino para navegar?
La verdad es que ya conozco unas cuantas regiones de Francia aunque me quedan muchas por descubrir. Elegir la zona de Borgoña Franche Comté fue el resultado de querer viajar por una región que no conocía, que fuese sencilla de pilotar y que una de las amigas con las que iba a viajar es especialista en vinos… Así que no tuvimos dudas.
¿Qué es lo que más te gustó de viajar por Francia en Borgoña/ Franche Compté de esta manera?
La sensación de libertad absoluta: ir a mi ritmo, sin prisas, con el paisaje cambiando lentamente a mi alrededor. Y todo sin el estrés de las carreteras o los trenes. Es un viaje muy relajante y, al mismo tiempo, lleno de pequeños descubrimientos.
¿Cuáles fueron las paradas o pueblos que más te gustaron?
Una de las paradas que más disfruté fue la de Chalone sur Saône, es un pueblo un poco más grande que los otros, más bien una ciudad pequeña. Y justo ese día había una especie de festival junto al río, volaron globos aerostáticos, había puestos para comer y beber junto a música en directo. Una velada que no olvidaremos.
¿Cuántas horas navegaste al día y qué duración tuvo tu crucero?
Mi crucero duró 4 noches, lo que equivale a 4 días completos y el día de entrar y de salir. Embarcamos en Saint Jean de Losne y fuimos hacia el sur. Navegábamos una media de 3-4 horas al día, a veces fueron 2h y otras 5h. Lo hacíamos por la mañana después de desayunar, así a la hora de comer ya estábamos amarradas al puerto del pueblo que tocase y podíamos salir a descubrir, a comprar, a hacer fotos…
¿Probaste la gastronomía local o tuviste alguna experiencia auténtica de la Borgoña?
Probamos, por supuesto, los vinos de la zona, uno de sus productos más reconocidos. Y también probamos algunas tablas de charcuterie, como ellos lo llaman. Con embutidos, quesos (¡el comté es mi favorito!), patés de campaña…
¿Algún consejo para quien quiera viajar por Francia y hacer la misma ruta?
Llevar ropa cómoda, adaptada para el calor y el fresco de la noche, aunque cuando estuvimos nosotras había una ola de calor y nunca pasamos frío. También aconsejaría programar una primera compra antes de embarcar para aprovisionar, al menos un par de días. A mí Rocío me ayudó a localizar lugares donde comprar antes de empezar nuestro viaje.
¿Cómo resumirías un día navegando? (comidas, paradas, dormir)
Un día típico empezaba con desayuno en cubierta, viendo cómo el canal se despertaba. Luego navegábamos unas horas, pasando esclusas y saludando a la gente que paseaba por la orilla. Y continuábamos el itinerario hasta nuestro siguiente punto para amarrar (ya teníamos más o menos planificados cada día, con la ayuda de Danfluvial). La cena podía ser en un restaurante local o a bordo con lo que habíamos comprado en el mercado. Dormir en el barco, con el silencio del agua alrededor, era la guinda del día.
Ver esta publicación en Instagram
¿Hubo algún momento, lugar o detalle que te robara el corazón?
En general, guardo el souvenir de este viaje como algo muy especial, como una postal llena de bonitos recuerdos. Me encantaron momentos como navegar por medio de los canales, sin prácticamente nadie alrededor, las vacas bebiendo agua en el río, los pueblos con las casas de piedra durante el recorrido… Y también las noches en cubierta, después de cenar, con un helado mirando a las estrellas.
¿Fue más fácil o más difícil de lo que pensabas manejar el barco?
Me resultó más fácil de lo que imaginé. Para pilotar no hacen falta muchísimas consignas ni te dan tanta información que no puedas procesar. En 20-30 minutos el equipo del puerto te explica el funcionamiento básico, las esclusas y lo necesario dentro del barco. Sólo se requiere prestar atención, y por lo demás, todo va saliendo sobre la marcha.
¿Tuviste algún imprevisto o susto? ¿Cómo lo solucionaste?
Lo cierto es que no tuvimos ningún imprevisto. Sólo la primera noche que como éramos novatas no acertábamos a conectar la electricidad, pero nuestros vecinos de puerto nos ayudaron. El ambiente que hay en este tipo de turismo es excelente: tranquilo, predispuesto a ayudarte…
¿Qué le dirías a alguien que sueña con hacer un viaje así pero tiene miedo?
Que se anime. No necesitas experiencia previa, y el ritmo es tan tranquilo que tienes tiempo para adaptarte. Además, el equipo de Danfluvial te acompaña antes y durante el viaje, así que nunca estás realmente solo. Es una forma única de viajar por Francia, perfecta para quienes quieren desconectar y vivir este país desde otro punto de vista.
¿Qué llevarías sí o sí en la maleta?
Además de las cosas que llevarías normalmente en tu maleta, no me olvidaría de un pequeño altavoz para poner música suave durante la navegación. No hay nada como ponerle banda sonora a nuestros viajes, que luego se convertirán en recuerdos. Ah, y protección solar.
Si repitieras el viaje, ¿hay algo que harías diferente?
La verdad, se me hizo corto. ¡Me estaba gustando tanto! Además como ya estábamos totalmente adaptadas y nos sentíamos seguras pilotando, me habría quedado un par de días más para poder hacer una ruta lineal un poco más larga y conocer más.
¿Algún truco o detalle que hizo tu viaje más especial?
De principio a fin fue especial. El mejor truco es ir con la mejor compañía y con ganas de disfrutar cada momento, sin prisas.
¿Qué le recomendarías a una familia o pareja que quiera probar esta experiencia?
Que no se obsesionen con llegar a muchos destinos, sino que disfruten del trayecto. Los niños lo pasan en grande participando en las maniobras, cocinando juntos o simplemente tomando el sol en cubierta. Es un viaje perfecto para reconectar y compartir momentos sin pantallas ni prisas.
¿Lo recomendarías a todo el mundo o a alguien en particular?
Lo cierto es que creo que este viaje le podría gustar a muchos tipos de personas con intereses diferentes. Creo que en familia puede ser una súper buena idea, y tal y como lo hice yo, con amigos, es divertidísimo.
¿Qué le dirías a alguien que sueña con hacer un viaje fluvial pero no se decide?
Que se quite la idea de que es complicado o solo para expertos.
Con el apoyo de Danfluvial, es más sencillo de lo que parece y la satisfacción de llevar tu propio barco es increíble. Una vez que lo pruebas, entiendes por qué tantos viajeros repiten.
Gracias, Rocío, por compartir con tanto detalle y cercanía tu experiencia a bordo, y por llevarnos contigo en ese viaje tranquilo entre canales, paisajes y rincones con encanto.
Tu mirada personal y auténtica nos ha permitido imaginar lo que se siente al viajar por Francia sin prisas, dejándose llevar por el ritmo del agua.
Si después de leer su historia te han entrado ganas de vivir algo así —en pareja, con tu familia o con amigos—, estaré encantada de ayudarte a organizar tu propia escapada fluvial.
Déjame un comentario o escríbeme directamente. ¡Será un placer acompañarte en esta aventura!
